


¡Hola! ... cómo cuesta retomar el hilo. Quiero antes que nada agradecer enormemente a todos los que os pasáis por el blog bien en silencio o dejando un comentario ... Es de lo más agradable leeros siempre. Os cuento que estos días ando un poco agotada...me he propuesto hacer algo de ejercicio, pasar el mayor tiempo posible con mi hijo y que ese tiempo sea de la mayor calidad, y poder dedicarme de vez en cuando un ratito a esto que tanto me gusta... la cocina. Pero el tiempo es el que es y no podemos estirarlo a nuestro antojo, así que tenemos que establecer un orden de prioridades. El trabajo absorbe una gran parte de mi energía y tiempo y aunque me gusta lo que hago a veces me agobio por no poder disponer de mas tiempo para lo que realmente me apasiona hacer.
La cocina, y a quienes os gusta lo sabéis es una excelente forma de relajarte y disfrutar. En fin, es la vida que nos ha tocado vivir, y ella va marcando los ritmos. Aunque a veces esos ritmos sean imposibles, esclavizantes , agotadores ... y una se resienta con mil historias.
Por eso a veces recetas como la de hoy son necesarias. No me desvinculan por completo de la cocina, pero al mismo tiempo no suponen un esfuerzo tremendo ni una gran inversión de tiempo. El tercer motivo por el que me gustan es que las puedo preparar junto a Eduardo, mi peque, y es casi como un juego... bueno, es un maravilloso juego que te permite compartir momentos que yo estoy segura nunca olvidaré.
Los bombones son para una gran persona ... bueno, ya los ha recibido, y le han encantado;¿cómo no? ella sabe valorar estos detalles como nadie... ella sabe por que le doy esos bombones junto con todo mi agradecimiento. Otro día la receta.
Ingredientes:
400 ml de leche.
7-8 cucharadas de helado de chocolate (yo usé el del "Chocolate Belga de Carrefour" ecológico, y me ha encantado).
2-3 cucharadas de azúcar (depende de lo goloso que seas)
Nata montada para decorar.
1 cucharada de cacao en polvo.
Elaboración:
Poner en el vaso de la batidora todos los ingredientes: la leche, el helado, el azúcar y el cacao en polvo. Batir con la batidora hasta que todos los ingredientes estén bien mezclados.
Servir en un vaso alto y decorar con la nata montada, y algún detalle que se te ocurra... una onza de chocolate, unas virutas de chocolate, fideos, o incluso cacao en polvo espolvoreado por encima de la nata.