MAGDALENAS DE XAVIER BARRIGA

¡¡Anda que no les tenía yo ganas a éstas magdalenas!!... las vi hace tiempo en el blog de Alicia Canelona, "recetario canecositas" y qué gracia me hizo el nombre... magdalenas de barriga!, al igual que Alicia también pensé que su nombre era debido a la forma que se les queda,semejante a una barriga dado el gran copete que tenían... y resulta que lo de Barriga viene del nombre del cocinero- repostero que las ha ideado Xavier Barriga, maestro panadero y confitero por lo visto muy prestigioso y del que una servidora no tenía ni idea... en fin, lo bueno de la cocina y de los blogs es que siempre estás conociendo cosas nuevas.

Bien, pues son unas magdalenas riquíiisimas, esponjosas y muy tiernas.

A partir de la receta de Alicia Canelona yo hice algunas variaciones adaptándola a mi gusto.

Sustituí una parte del aceite por mantequilla,por la sencilla razón de que me quedaba poquísimo aceite de girasol, y se me ocurrió sustituír una parte por mantequilla. La verdad es que salieron deliciosas, eso si, no sé cómo quedarán con toda la proporción de aceite... otro día habrá que probar.

En cuanto a las ralladuras les puse la ralladura de un limón y de media naranja, además de un poquito de vainilla en polvo.Para mi gusto DELICIOSAS.

A algunas les puse azúcar por encima antes de hornear para que quedara una costrita crujiente que además de hacerlas aun mas ricas contribuye a que se conserven mas tiernas durante mas tiempo.

Hay una serie de trucos que son válidos en general a la hora de elaborar unas magdalenas si queremos que nos queden espectaculares. Vamos con ellos:

*En primer lugar es importantísimo que el horno esté precalentado a 250º, ese primer golpe de calor es fundamental para lograr que nuestras magdalenas queden bien encopetadas y con una forma atractiva.

*En segundo lugar (y éste es un truco comprobadísimo) es muy recomendable meter las cápsulas de papel dentro de moldes rígidos, metálicos por ejemplo. De ésta manera evitamos que la magdalena se expanda en vez de quedar recogidita en el centro y subiendo así hacia arriba creando ese copete que ansiamos tanto.

*Y en tercer lugar dejaremos reposar la masa tapada con un paño en el bol donde hemos batido la mezcla durante una hora mínimo, o mas tiempo pero en éste caso dentro de la nevera.

Aquí no me atrevería a decir que es una regla general, aunque para ser sincera lo desconozco... Supongo que habrá masas que precisen reposo y otras que no. Yo suelo limitarme a hacer lo que me dice cada receta en concreto , y así suele funcionarme bastante bien.

Paso a dejaros la receta que es muy facilita.

Ingredientes:

3 huevos de un tamaño normal.

175 grs de azúcar.

60 grs de leche (para repostería siempre uso entera).

190 grs de aceite de girasol (yo puse 95 grs de mantequilla y 95 grs de aceite de girasol).

210 grs de harina floja.

2 sobres de gasificante (uno azul y otro blanco).

Una pizca de sal.

La ralladura de media naranja y un limón.

La punta de una cucharita de café de vainilla en polvo.

Elaboración:

Precalentamos el horno a 250º.

Comenzamos batiendo los huevos junto con el azúcar hasta que espumen.

Aparte en una taza mezclaremos la leche con el aceite y la mantequilla (ésta última la habremos fundido previamente en el microondas).

Incorporamos la mezcla de aceite y mantequilla a la mezcla anterior de huevos y azúcar.

batiendo con las varillas eléctricas o robot de cocina a velocidad lenta.

Aparte en un bol pondremos la harina tamizada para que nos quede floja junto con el impulsor (los dos sobres), las ralladuras de limón y naranja, la vainilla en polvo y la pizca de sal.

Añadimos ésta mezcla a la mezcla anterior (la líquida), batiendo con las varillas eléctricas en marcha lenta (hasta lograr una masa homogénea). Una vez que ya se ha mezclado seguimos batiendo durante dos o tres minutos pero a marcha rápida.

Dejamos la masa una hora como mínimo a reposo en el bol tapada con un paño. Veremos que se forman unas burbujitas en ella, esto es que el impulsor está haciendo su trabajo.

Rellenamos las cápsulas 3/4 partes de su capacidad, e introducimos al horno que bajaremos a 210º durante 14- 16 minutos. Antes de meterlas al horno podemos espolvorearlas con azúcar o dejarlas así. Eso a vuestro gusto. A mi me encantan con la costra de azúcar.

Sacar y dejar enfriar en una rejilla.

¡¡Y a disfrutarlas!!